Horóscopo Chile 2018: Una guía de vaticinios
ASTROLOGÍA
Este año (del perro), qué duda cabe, será un muy mal año para quienes despierten antes que el recientemente presidente electo. Será un año de dificultades para los ancianos y los taxistas, como siempre. Los niños, en su incorregible virtud, atarán cabos y se rebelarán contra todos, por suerte. Cuidado con las mascotas. Jamás darles la espalda durante las fiestas patrias. Alimentarlas con cuidado y benevolencia. No acariciarlas por la noche. Si vive en las afueras de Santiago, lamentablemente, use el transporte público sólo después de mediodía.
A los signos de agua se les viene una tormenta de magnitudes insospechadas. Cuidado con su hermana vegana y las cornisas de los edificios derruidos de las calles del puerto. En los meses de invierno sus plantas de interior se verán afectadas por una extraña plaga. Ojo con eso. Cuide su dentadura y no apueste. Sus vecinos comenzarán a espiarle tras las cortinas e inventarán un sinnúmero de eventos que nada tendrán que ver con la realidad. No deje de sonreírles.
Quienes se identifican con el elemento tierra deberán comenzar el verano con su pie izquierdo. No asistir, durante el primer semestre, a funerales, museos y parques. Anude sus zapatos con delicadeza antes de patear a alguien. Se recomienda a los signos de tierra lavar los platos, no cortarse las uñas y alimentarse con harina de pescado. Esto hará del contraste (el elemento tierra, el pescado procesado como acicate marino) un posible beneficio a definirse.
Los signos de aire (o etéreos, según la cursilería que aplique) se verán envueltos en reñidas disputas con sus padres. Considérese, no tan seriamente, la posibilidad de hacer testamento, por si acaso. Esa mujer que tanto le atrae se verá envuelta en un tórrido romance con un domador de leones. O un torero. Cuide su peso. Evite las bebidas gaseosas y las empanadas de alcayota.
Fuego es lo que habrá en el interior de aquellos que se identifican con este elemento. Por lo tanto evitar las idas fugaces a los baños turcos, a las calderas de la RPC o a los juegos del estero Marga marga. Ver la posibilidad de realizar un viaje a Tierra del fuego, aunque parezca un despropósito. Cuelgue los guantes por decoro y abandone a ese socio capitalista que no deja de hurgarse la nariz con el menique mientras están almorzando. Ande en bicicleta y realice genuflexiones frente a un espejo cóncavo tres veces por semana, mínimo.
Por Paulino y Carla
